El pasado 13 de mayo, en una resolución que trascendió recién en las últimas horas, el Procurador General de la Nación, Eduardo Casal, (foto portada) inició un sumario administrativo contra el fiscal ante el Tribunal Oral de Mar del Plata, Juan Manuel Pettigiani, a la vez que le requirió “explicaciones” por unos dichos que aquel habría manifestado en un programa de televisión sobre el dirigente Juan Grabois, denunciado por posibles delitos graves de acción pública.
Por otra parte, también el jefe de los fiscales le otorgó un plazo de 10 días hábiles para que haga su descargo, lo que ya hizo Pettigiani, y conformó un Consejo Evaluador integrado por cinco fiscales, tanto de Capital Federal como de Mendoza.
Fuentes judiciales de la ciudad consultadas califican al hecho como “alarmante”, ya que “el denunciante termina siendo el victimario”, y la cuestión de fondo, es decir el posible delito que se debe investigar, quedaría en un segundo plano.
Es que el fiscal marplatense había denunciado a Grabois a comienzos de marzo por “la posible comisión de los delitos de incumplimiento de los deberes de funcionario público, administración fraudulenta y defraudación al FISU” (Fondo de Integración Socio Urbana), vinculado al dirigente social.
En concreto, pidió que se investigue el accionar de Grabois en la construcción de viviendas mediante dicho Fondo y que nunca fueron terminadas en el barrio Fortunato de la Plaza de Mar del Plata, tema que fue revelado por este medio desde 2022. (https://elobservadoronline.com.ar/las-viviendas-que-financio-el-fideicomiso-vinculado-a-grabois-que-nunca-se-termino/)
“Hay una defraudación al FISU, destinado para urbanizar barrios populares, porque no se dotó en nada de infraestructura al barrio, y al programa Casa Propia [dependiente del Ministerio de Desarrollo Territorial, hábitat y Vivienda], que está destinado a facilitar la construcción de casas por parte de particulares”, explicó el fiscal general en diálogo con diferentes medios.
Justamente, fue en una entrevista periodística que Pettigiani manifestó, para graficar su denuncia, que “Pablo Escobar Gaviria tampoco era el responsable de estar en cada puesto de drogas, vendiendo, entregando, encargándose de la distribución, sin embargo era el responsable de un imperio”.
Y agregó: “Grabois fue el que puso a la funcionaria a cargo (N de la R: por Fernanda Miño, ex titular de la secretaría desde donde funcionaba el Fondo cuestionado), quien obtenía por la presión política y la inserción que tenía en el gobierno anterior la derivación de una gran cantidad de recursos y básicamente monopolizaba a través de su organización la construcción”.
Ello motivó una denuncia por parte del amigo papal por haberlo comparado, según el, con el “famoso narcotraficante colombiano ya fallecido”. Además, en su presentación, no se privó de descalificar al representante del Ministerio Público, y de solicitar un pedido de disculpas y sanciones disciplinarias, lo que parece haber encontrado eco en el Procurador Eduardo Casal a través de la CUDAP 918/2024
“Aun cuando se trate de un fiscal como Pettigiani, de sobrados antecedentes contrarios a los derechos humanos, tolerante con posturas intolerantes y hasta indulgente con posturas nazis, la trata de personas o la violencia de género”, sostuvo Grabois.
Las casas nunca terminadas en Mar del Plata, en una recorrida hecha en febrero por este medio
La respuesta del fiscal no se hizo esperar. El pasado 18 de junio, presentó su descargo donde realizó definiciones contundentes.
“A pesar de lo que establece la Constitución y la Ley de Ministerio Público, a los fiscales nadie nos cuida”, comienza diciendo. Para luego continuar: “El Procurador es el garante de la independencia funcional que implica proteger a los Magistrados que representamos al Ministerio Público de las presiones externas”.
“El archivo era el camino que correspondía, pues Grabois no había acompañado prueba alguna de sus dichos”, opina el dr. Pettigiani. Y aclara: “Sorpresivamente, la Procuración subsana esa grave omisión, más la solución era idéntica, pues una simple compulsa de lo afirmado por el presentante, permite concluir en la falsedad de lo expuesto y que la misma resulta manifiestamente inconducente”.
En otro fuerte párrafo, aduce que “lo que demuestra una clara persecución contra el suscripto, es que, sin ningún análisis, la sola presentación de Grabois, motivó la formación de prueba por parte de la Procuración, la apertura del presente proceso y la comunicación al Consejo evaluador, con lo que no solo se afecta la función del suscripto, sino también de otros magistrados de este Ministerio Público”.
“Grabois, en lugar de dar explicaciones acerca de los hechos denunciados, pretende intimidar al suscripto, y al resto de magistrados de este Ministerio Público, vertiendo una serie de falsedades, que el Señor Procurador soslaya, al abrir el presente proceso sin un mínimo análisis, con grave daño a la independencia de este Ministerio Público”, sostiene el fiscal.
Y deja clara su postura: “Grabois, siguiendo la premisa de que no hay mejor defensa que un ataque, lo hace mintiendo con que las denuncias realizadas por el suscripto tienen una intención política”.
“Mientras que el pedido del suscripto de que se concentren todas las investigaciones vinculadas a esta problemática y se designe un equipo de fiscales para su rápida investigación, ni siquiera fue respondida al suscripto”, concluye Pettigiani, “la señal que se le da a la sociedad, y al resto de los fiscales, es que, en lugar de armar la comisión para perseguir la investigación de graves delitos, se arma la comisión para investigar al fiscal denunciante, coadyuvando en la impunidad que pretende Grabois”.
Por último, hace su defensa respecto a su actuación: “Como no iba a actuar como lo hice. Era un imperativo funcional denunciar, en defensa de los intereses generales de la sociedad, cuando, el desmanejo en relación a los fondos fiduciarios y los destinados a la ayuda social ha sido monumental y en la Ciudad que habito, grandes cantidades de dinero público son desviadas del fin para el que habían sido entregadas, burlando tanto, los intereses de quienes tributan para que esos fondos integren el presupuesto, como por aquellos que tuvieron que ingresar a casas sin terminar, en condiciones de infraestructura inexistentes, simplemente para tratar de “agarrar algo”, cuando deberían ingresar a viviendas dignas en barrios dignos”.
Cabe recordar que la denuncia realizada por Pettigiani contra Grabois, realizada en los primeros días de marzo de este año, derivó en principio, en el juzgado a cargo de Julián Ercolini. Pero dicho magistrado se consideró incompetente y envió el expediente a su colega marplatense Santiago Inchausti, que se pronunció en igual sentido.
Por lo que, casi cuatro meses después, la causa sigue sin juez. A lo que se suma ahora este sumario contra el propio fiscal.
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@PortaluppiPablo
El título dice que soy Licenciado en Periodismo, pero eso poco importa. Lo más importante es que solo dependo de mi.