El paso de Sergio Massa por Mar del Plata en los últimos días dejó mucha “tela para cortar”. Con la excusa de la inauguración de una nueva edición del Festival Internacional de Cine llevado a cabo en la ciudad, retomado desde 1996, el candidato presidencial se dedicó a hacer campaña y dejó expuesta la gran pasividad que envuelve a una buena parte de la sociedad.
Y a cierta complicidad de importantes sectores de poder.
Resulta llamativo que para inaugurar semejante evento, lo haga un ministro de Economía. Pero así son las cosas en el gobierno de Alberto Fernández, donde Massa ocupa el centro de la escena desde junio pasado, cuando fue ungido precandidato a Presidente por el oficialismo. Y mucho más desde que salió primero en las elecciones del pasado 22 de octubre, y logró entrar a la segunda vuelta del próximo 19 de noviembre.
Lo primero que hizo el funcionario fue “juguetear” con el límite de la veda electoral. El Código Electoral prohíbe, en su artículo 64, la publicidad de los actos de gobierno durante los 25 días previos a la elección. ¿Qué hizo Massa en Mar del Plata?
Anunció el 2 de noviembre, a 17 días del balotaje, que si es electo Presidente, los “jubilados y pensionados” van a ser parte de sus “prioridades” y afirmó que junto a la titular de Anses, Fernanda Raverta, están “buscando una solución para ir a buscar a los 20 mil jubilados argentinos que cayeron víctimas del sistema de AFJP para darles el derecho a una jubilación digna como merecen”.
Raverta perdió las elecciones locales con el intendente Guillermo Montenegro, quien fue reelecto con más del 40% de los votos contra un 36% de la dirigente camporista. Pero Massa fue el candidato presidencial más votado en la ciudad, al igual que Axel Kicillof para gobernador, lo que no deja de ser un dato trascendente en un distrito tradicionalmente refractario al peronismo.
¿Violó el ministro de Economía la veda electoral? Todo indica que sí. La legislación entiende por acto de gobierno “la realización de actos inaugurales de obras públicas, el lanzamiento o promoción de planes, proyectos o programas de alcance colectivo y, en general, la realización de todo acto de gobierno que pueda promover la captación del sufragio a favor de cualquiera de los candidatos a cargos públicos electivos nacionales”.
El candidato de Unión por la Patria fue denunciado recientemente por violar la veda electoral al hacer anuncios de créditos a través de la Anses, justamente junto a la mencionada Fernanda Raverta, por anunciar un aumento en el monto de los créditos del organismo.
La declaración hecha en Mar del Plata fue en línea con aquel anuncio por el que fuera denunciado.
“Si me dan la responsabilidad de gobernar, no quiero que tengan ninguna duda de que jubilados y pensionados van a ser parte de mis prioridades”, indicó Massa en un seminario con jubilados, acompañado por Raverta, y dos de sus más estrechos colaboradores locales, el secretario de Economía del Conocimiento, Juan Manuel Cheppi y el director de Aerolíneas Argentinas, Ariel Ciano.
El primero, hijo del ex embajador en Venezuela Carlos Cheppi, suena como posible precandidato a intendente local en 2027. Además, se lo vincula muy directamente con el portal de noticias local 0223, muy leído en la ciudad.
Otro hombre fundamental en la estructura política local de Sergio Massa es el empresario Javier Faroni, quien fuera involucrado en el escándalo de la venta de entradas para un partido de la Selección Argentina de fútbol en marzo pasado. La plataforma donde se podían conseguir las entradas, Deportick.com, es propiedad de la hermana del conocido productor teatral, Marcela Viviana Faroni, en sociedad con Javier.
Según reveló el diario La Nación en su momento, Deportick es un nombre de fantasía registrado por la firma Mastea 123 S.A., registrada por el propio Javier Faroni el 26 de marzo de 2018 con otro nombre, Más Teatro 123 S.A.
La firma tiene domicilio en la calle La Rioja 2254, depto 2. El vértigo de los hechos en el país hizo olvidar aquel asunto, pero hay quienes sostienen en la ciudad que también allí habría funcionado el comando de campaña del primer intento de Raverta para llegar a la comuna marplatense, en 2019. Uno de los jefes de campaña de la camporista fue el propio Juan Manuel Cheppi.
Otro de los hombres que pugna por cobijarse en el massismo es el indescifrable Rodolfo Manino Iriart, muy cercano a Daniel Scioli en su momento, y luego refugiado al calor de Alberto Fernández, que lo designó Director del Correo Argentino, esos puestos siempre a mano, bien remunerados, y que nadie sabe para qué sirven.
Manino también fue “Coordinador de retenes” durante la cuarentena en 2020, apoyado por el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni. Es decir, era aquel que controlaba que nadie entrara o saliera de la ciudad durante el Covid-19.
Los buenos oficios de Javier Faroni, residente de Mar del Plata, se hicieron ver en los últimos días. Previo a la inauguración formal del Festival, Massa se mostró con diversos artistas que apoyan su candidatura. Allí estaban, entre otros, Pablo Echarri, Juan Leyrado, Victoria Onetto, y Gerardo Romano, bajo el lema “Cine Argentino Unido”.
El colectivo que lleva aquel nombre hizo su aparición en el Festival de Cine de San Sebastián, realizado en septiembre último, para expresarse contra el presunto cierre de instituciones culturales, que propondría el adversario de Massa, Javier Milei. Entre ellos, el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA).
Las caras visibles en aquel encuentro fueron el director Santiago Mitre, y los actores Leonardo Sbaraglia y Dolores Fonzi, tras una bandera argentina con la frase “Cine argentino unido”.
Rodeado de artistas K, Sergio Massa prometió que va a “trabajar en más y mejor financiamiento para el cine argentino”, y apuntó contra quienes quieren “tachar a la cultura”, en clara referencia a las propuestas de su contrincante en el balotaje, el postulante de La Libertad Avanza, Javier Milei.
“Es una industria que genera trabajo, que genera divisas, que muestra a la Argentina en el mundo. Vengo acá para comprometerme a trabajar en más y mejor financiamiento para el cine argentino”, agregó.
¿Otra violación a la veda electoral?
Y luego llegó el turno del acto inaugural del Festival de Cine. En la apertura estuvieron junto a Massa el ministro de Cultura, Tristán Bauer; el presidente del Incaa, Nicolás Batlle; el presidente del Festival de Cine, Fernando Juan Lima, el director artístico, Pablo Conde y, cuándo no, la directora ejecutiva de Anses, Fernanda Raverta.
Además, asistieron programadores, voluntarios, actores, productores cinematográficos, referentes del Colectivo Cine Argentino Unido, representantes de UPCN, la hoy funcionaria provincial Florencia Saintout, autoridades locales y estudiantes marplatenses de la Tecnicatura Universitaria en Comunicación Audiovisual de la UNMdP.
También estuvieron presentes en el acto distintas organizaciones sociales, con remeras y bombos, que nadie sabía qué tenían que hacer allí. Vale destacar, como nota de color, que la ceremonia fue tan austera que no ofrecieron nada para comer ni beber, y que la misma ofreció serias fallas de seguridad.
Este medio pudo corroborar que cualquiera entraba y salía en toda ocasión, cuando quisiera.
Y Massa comenzó a hacer campaña.
“Porque el cine es una industria que genera trabajo, que genera divisas, que muestra la Argentina al mundo, que nos permite como sociedad reconstituir y construir permanentemente un sistema de valores, vengo acá a comprometerme para trabajar en más y mejor financiamiento para el cine argentino, cuidándolo”, sostuvo el ministro de Economía durante su discurso en la sala Piazzolla del Teatro Auditorium.
A su vez, añadió que “la combinación del cine con la generación de recursos de otras industrias que desde lo audiovisual han generado diferentes herramientas de difusión y otras economías, como las plataformas, que tienen que servir para sostener desde el punto de vista de la construcción de la identidad cultural, pero sobre todo el trabajo de todos los actores y de todos los emprendedores de las industrias culturales”.
Vale reiterar que Massa logró colocar a Cheppi como secretario de la Economía del Conocimiento, un cargo evidentemente fundamental en su gobierno si logra el triunfo el próximo 19.
Pero por la noche de aquel jueves 2 llegó el plato fuerte, literalmente. El candidato fue agasajado con una cena en el Hermitage Hotel, propiedad del “dueño” de Mar del Plata, Florencio Aldrey Iglesias, uno de los vacunados vip y de fuertes vínculos con el poder de turno.
Al encuentro asistieron más de 400 personas, entre ellos, dirigentes políticos, sindicales, empresarios y hasta representantes de la Iglesia. Cuando hizo su ingreso Massa, fue recibido con una ovación y fuertes aplausos.
Al hombre que en un año de gestión en Economía duplicó la inflación, llevándola al 12 % anual, generó 2 millones más de pobres y usó dineros públicos, unas billonadas, para hacer campaña. Aquel aplauso genera una indignación exasperante.
Allí estuvieron, entre otros, Sandra Cipolla (Astilleros SPI, de Horacio Tettamanti, ex funcionario k), los empresarios pesqueros Antonio Solimeno (Grupo Solimeno) y José Moscuzza, Martín y Germán Cabrales, Sebastián Larrea (Hawk Group), Patricio Gerbi (Coarco, involucrado en la causa de los cuadernos) y Luis Terry (Norgreen), entre otros.
Con una sonrisa en su rostro, Massa dijo, entre varias cosas, que la del 19 “no es una elección más”, ya que “los daños que se producen cuando se entra en procesos como el de Martínez de Hoz llevan muchos años. ¿Cuánto le costó a esta ciudad reconstruir la industria textil? ¿Cuántos años tuvieron que ver a Mar del Plata liderando la tabla del desempleo?”, preguntó.
Tal vez se olvidó que él apoyó aquellas políticas, cuando se afilió a la UCEDE en 1993, que en alianza con Menem, prolongó aquel programa instaurado por el ministro de Economía del Proceso.
Pero antes agradeció al empresariado por haber soportado “un año difícil en el que a Argentina le tocó enfrentar dos desafíos enormes, que generaron mucha dificultad y reflexión”.
Olvidó, también, que durante ese lapso el estuvo (y aún lo está) al mando de Economía.
pablo@elobservadoronline.com.ar
@PortaluppiPablo
El título dice que soy Licenciado en Periodismo, pero eso poco importa. Lo más importante es que solo dependo de mi.