EL GOBIERNO DE CARLOS ARROYO ESTUDIA HACER UNA PRESENTACIÓN JUDICIAL
A pocos días de comenzada la temporada, que se prevé exitosa, Mar del Plata sigue paralizada por un grave conflicto entre el Gobierno de Carlos Arroyo, aliado a Cambiemos, y el Sindicato de Trabajadores Municipales (STM). La medida de fuerza elegida por el gremio conducido por Antonio Gilardi es la retención de tareas, que en los hechos, es lisa y llanamente un paro. En un comienzo, los trabajadores concurrían a sus lugares de trabajo, pero ya en los últimos días de diciembre ni siquiera lo hacían. Dicha medida, según algunos juristas, posee al menos una “dudosa legalidad”, por lo que desde la administración local dejaron trascender que evalúan tomar alguna medida técnico-legal en las próximas horas.
La excusa formal de la pelea entre el sindicato y la administración arroyista es un reclamo salarial. A comienzos de 2018 la paritaria se había cerrado con un incremento de 12% para abril y otro 6% en agosto. La corrida cambiaria y su consecuente explosión inflacionaria que comenzó hacia fines de abril modificaron todos los escenarios. Mientras el sindicato pedía un 12% retroactivo a octubre más un 7% para noviembre y una reapertura de la discusión en diciembre, el gobierno local comenzó ofreciendo un 12% en diciembre y otro 20% para marzo de 2019, lo que medido de abril 2018 al mismo mes del flamante año hace un 50% de incremento. Y una reapertura de la discusión salarial en abril.
La protesta comenzó el 10 de diciembre, y a los pocos días devino en una retención de tareas por tiempo indeterminado, que aún continúa, llevando de este modo 23 días hábiles consecutivos. En el medio, hubo ocho propuestas salariales por parte de la comuna, declaraciones subidas de tono, y hasta dos recientes reuniones en La Plata, sede de la gobernación bonaerense, que también fracasaron. Desde el gobierno comunal tildan a la medida de fuerza de “infundada, abusiva, e irracional, y con un innegable trasfondo político”. Ante la intransigencia del gremio, el Intendente Carlos Arroyó decidió a través de un decreto firmado el último viernes 4 de enero otorgar un 14% de aumento salarial retroactivo a diciembre, lo que sumado al 18% ya otorgado en 2018 hace un 32% de incremento, sin cerrar la discusión paritaria. Esta decisión va en línea con lo que hizo durante el año pasado la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal con los docentes, cuyo conflicto aún no fue zanjado. Pese a ello, y que el propio Ministerio de Trabajo provincial le solicitó al gremio levantar las medidas de fuerza, el STM decidió continuar con la retención de tareas, lo que genera innumerables trastornos.
Además de la basura rebalsada en los cestos de las calles y las plazas, que está a la vista tanto de los vecinos como de los turistas, existen otras graves consecuencias menos visibles, afectando directamente servicios públicos esenciales. Por ejemplo, 29 centros de atención primaria de la salud se encuentran sin atención hace más de 20 días, ocasionando la suspensión de más de 100.000 turnos médicos y más de 1.000 mamografías –radiografía que permite detectar el cáncer de mama-. A dichas salitas médicas concurre la gente menos pudiente, por ejemplo aquellos que no poseen ni siquiera una obra social. A su vez, la medida de fuerza del sindicato generó la pérdida de 5.400 turnos para renovar la licencia de conducir, como así también más de 900 registros que no fueron entregados. Dentro de estos damnificados, hay numerosos trabajadores que necesitan la licencia para poder ejercer su trabajo, como transportistas y fleteros. Por otro lado, hay cientos de planos de construcción y de habilitaciones comerciales demorados, cuyo trámite se vuelve urgente para aquellos comerciantes que necesitan de la fuerte afluencia turística de enero, y también los permisos para vender bebidas alcohólicas. Así mismo, los controles de tránsito se hallan con la mínima atención, en momentos en que ingresaron a la ciudad en los últimos días miles de personas. Y el costado más siniestro del asunto: hay cerca de 60 cadáveres abandonados en los depósitos de los cementerios que no fueron entregados a sus familiares para su entierro. Lo que genera, además del dolor de los seres queridos, un evidente riesgo sanitario ante la putrefacción de los cuerpos. Todos los trámites y servicios detallados pueden ser solamente brindados por la Municipalidad, ya que ninguna empresa o entidad puede hacerlo en su lugar.
Como se dijo anteriormente, la administración de Arroyo evalúa tomar medidas legales. Según juristas consultados, la retención de tareas de los municipales roza la ilegalidad. “En la regulación de los contratos civiles bilaterales, las partes se obligan recíprocamente la una hacia la otra”, explica un abogado consultado por este medio. Y prosigue: “De acuerdo al artículo 1201 del Código Civil, una parte puede retener su prestación, si la otra parte no ha cumplido la suya”. El contrato de trabajo pertenece a la clase de los contratos bilaterales, de modo que el trabajador se obliga a prestar el servicio y el empleador a pagar la remuneración. Dice el mismo abogado consultado que “las normas generales de la regulación de los contratos en el derecho civil son aplicables al derecho laboral, a través de los contratos de trabajo. Para que el trabajador retenga su prestación, o sea se niegue a trabajar, se requiere que el empleador esté en mora, y que su incumplimiento sea significativo”. No sería este el caso, ya que desde el Municipio aseguran que el sueldo se deposita el primer día hábil de cada mes con recursos propios y también ya se abonó el medio aguinaldo de diciembre. “El salario se paga en tiempo y forma”, afirman.
Ante este conflicto, no habría que perder de vista algunas cuestiones. Mar del Plata es el tercer distrito electoral en importancia de la estratégica provincia de Buenos Aires, detrás de La Matanza y apenas por debajo de La Plata. La ciudad balnearia posee casi 570.000 electores, lo que representa casi el 5% de todo el padrón bonaerense. Además de la evidente vidriera política que significa el mes de enero en estas playas para todo aquel dirigente del país que desea competir electoralmente- y en particular este enero de 2019, año de elecciones generales-, Mar del Plata es cada vez más elegida por distintos políticos para lanzar precandidaturas o simplemente inaugurar oficinas de campaña o trabajo. No es un dato menor que Juan Grabois, importante referente social más relevante por su gran cercanía por el Papa que por su influencia política, haya lanzado su nuevo espacio Frente Patria Grande en la ciudad costera. Y para el próximo 24 de enero, la “CTA de los trabajadores” organizó una marcha en Mar del Plata contra “el tarifazo, los despidos, y el ahogo económico y financiero del Gobierno Nacional”.
El conflicto, a estas alturas, parece haber tomado otros carriles, Fue muy explícito a este respecto el propio secretario de Prensa del Sindicato Municipal, Luis María Muñoz: “Además del aumento, queremos la devolución de la bonificación que le sacaron a los docentes (N. de la R.: se trata de una modificación en el régimen de pago a los docentes municipales de una bonificación dada hace 30 años que actualmente se encuentra judicializada). También pedimos el pase a planta permanente de los trabajadores temporarios, la puesta en funcionamiento de la comisión de ascensos y promociones, el pago de bonificación por 25 años de servicios y el pago de las vacaciones a los trabajadores jubilados”.
Por su parte, la Federación de Sindicatos Bonaerenses (FESIMUBO), que conduce Rubén “Cholo” García, vinculado al peronismo provincial pero con fuertes vínculos con el kirchnerismo y el sindicalismo más combativo, amenazó no sólo con paralizar Mar del Plata durante la temporada, sino también con un paro de la Federación en todos los municipios de la Provincia de Buenos Aires para antes de fin de enero.
Pablo Portaluppi
@portaluppipablo
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El título dice que soy Licenciado en Periodismo, pero eso poco importa. Lo más importante es que solo dependo de mi.